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Cómo mejorar la vida de tu perro viejito: Consejos y cuidados esenciales de seniors.

Partner In Paw 30 de septiembre, 2024

La senilidad en perros ancianos, también conocida como síndrome de disfunción cognitiva (SDC), es un conjunto de cambios físicos y mentales que ocurren debido al envejecimiento. Al igual que en los humanos, los síntomas pueden variar en intensidad y aparición, pero generalmente afectan tanto el bienestar físico como emocional del perro. Aquí puedes identificar cuáles son y a qué edad podría comenzar a mostrarlos:

Encanecimiento del pelaje: Especialmente alrededor del hocico y la cabeza.
Pelo áspero o hirsuto: El pelaje se vuelve áspero, menos brillante, seco y difícil de controlar.
Caída del pelo: Pérdida de pelo, huecos de calvicie.
Mal olor: Tu perrito puede transmitir un olor más fuerte proveniente de la piel o el aliento.
Falta de apetito: Mostrar menos interés en la comida, lo que a su vez puede llevar a una pérdida de peso significativa.
Pérdida de peso: Por la disminución del apetito o problemas de absorción de nutrientes.
Inactividad: Dolor y rigidez, lo que dificulta el movimiento. El perro se vuelve menos activo, evitando actividades que solía disfrutar, como caminar o jugar.
Pérdida de la audición: Causa desorientación o problemas para responder a comandos.
Disminución de la visión: Dificultad para ver objetos o personas a su alrededor.
Reducción del olfato: Afecta su interés por la comida o su capacidad para orientarse.
Mayor necesidad de orinar: Mayor frecuencia de micción o incluso incontinencia.

¿Cómo hacer más cómoda la vida de una mascota mayor?

Hacer la vida más cómoda para una mascota mayor implica adaptar su entorno y cuidados a sus necesidades específicas. Es importante hacerlo, pues con esto prevendrás que tu mascota sienta dolor, que desarrolle enfermedades, y evitarás que su ánimo decaiga.

Ajustes en su dieta:

Elige alimentos formulados para mascotas senior. Estos contienen menos calorías pero más nutrientes esenciales como antioxidantes y ácidos grasos, que ayudan a proteger las articulaciones y el sistema inmune.
Proteínas de alta calidad. Las mascotas mayores aún necesitan proteínas para mantener la masa muscular, pero deben ser de fácil digestión. Elige alimentos con proteínas magras y de alta calidad como pollo, pavo o pescado.
Control de calorías: Los animales mayores tienden a ser menos activos, por lo que necesitan menos calorías para evitar el aumento de peso. Si es necesario, ajusta las porciones y el contenido calórico de su dieta. Lo más recomendable es brindar una comida al día.
Fibra y digestión: Un aumento en la fibra puede ayudar a mejorar la digestión y evitar problemas de estreñimiento. Busca alimentos que contengan fibra natural, como apio, espinaca y brócoli.

Considera utilizar platos elevados para que no tenga que agacharse a comer.
Humedece sus croquetas. Si notas que bebe menos agua, considera añadir alimentos húmedos a su dieta, puedes utilizar Aceite de Salmón, Aceite de Hip & Joint, o caldo de pollo/res.
Suplementos Esenciales:

Para las articulaciones, utiliza Hip & Joint Oil o Masticables, ya que contienen glucosamina y condroitina para mejorar la movilidad, reducir la rigidez, dolor e inflamación, prevenir displasia y otros padecimientos óseos y articulares.
Proporciona Aceite de Salmón Natural, ya que es rico en ácidos grasos omega-3 para promover la salud del pelaje y la piel, evitando la caída excesiva de pelo. Además, sus antioxidantes ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, mejoran la función cognitiva y previenen enfermedades.
El cuidado bucal es muy importante para prevenir periodontitis, gingivitis y cáncer. Incorporando Oratene a su agua diariamente estarás limpiando y regulando las bacterias de su boca sin necesidad de cepillar. Las enzimas de su fórmula reducen el sarro, previenen la xerostomía y eliminan el mal aliento sin dañar su estómago ni riñones.
Al darle Probióticos diariamente, mantienes un microbioma saludable, una digestión y salud intestinal adecuadas, heces firmes y oscuras, además de respaldar el sistema inmunitario y promover la absorción de nutrientes.
Calming Oil & Masticables son una increíble opción para tratar la ansiedad, el nerviosismo, dolor crónico e insomnio. Úsalos cuando tu perrito presente dolor intenso, cuando tenga miedo o ataques de nervios. Además, al darle una dosis diaria un par de horas antes de dormir, promoverás un descanso profundo y favorecedor para su salud.

Ejercicio físico y mental.

Intenta pasearlo por lo menos una vez al día, pero asegúrate que sean paseos cortos. Además incorpora juegos tranquilos, para mantener su movilidad sin sobrecargarlo.
Dedica tiempo diariamente a proporcionar juguetes interactivos o rompecabezas que mantengan su mente activa. Puedes hacer tú mismo juegos de estimulación mental caseros.
Asegúrate de que haga ejercicio en superficies suaves o antideslizantes, como césped o alfombras, para evitar lesiones.

Cama cómoda: Proporciona una cama ortopédica que ofrezca soporte adicional para las articulaciones y los músculos.
Acceso fácil: Facilita el acceso a los lugares que más frecuenta, como el sofá o la cama, instalando rampas o escalones.
Control del dolor: Consulta con un veterinario sobre qué medicamentos pueden ayudar a aliviar el dolor, si es que tu mascota ya experimenta dolor crónico.
Revisiones veterinarias: Programa chequeos regulares para monitorear su salud y ajustar los cuidados según sea necesario.
Ambiente tranquilo y amoroso:

Crea un espacio tranquilo donde pueda descansar sin distracciones o estrés.
Sé atento y cariñoso con tu mascota, esto contribuirá significativamente a mejorar la calidad de vida de tu mascota senior.

Estos cambios ayudarán a tu mascota mayor a mantenerse activa, feliz y saludable durante sus años dorados.

Infecciones y Enfermedades Comunes en Perros Mayores

En perros mayores, el sistema inmunológico tiende a debilitarse, lo que los hace más susceptibles a infecciones y enfermedades. Algunas de las infecciones y enfermedades más comunes y sus síntomas son:

Del Tracto Urinario (ITU):

Síntomas: Aumento en la frecuencia de micción, cálculos en la vejiga, dolor al orinar, sangre en la orina, y accidentes en la casa.
Posible Causa: Las ITU pueden ser causadas por bacterias que ingresan a través de la uretra y colonizan la vejiga. Los perros mayores, especialmente las hembras, son más susceptibles debido a la debilidad del sistema inmunológico y la incontinencia.

Dentales:

Síntomas: Mal aliento, dificultad para comer, encías inflamadas, pérdida de dientes.
Posible Causa: La acumulación de placa y sarro en los dientes puede conducir a infecciones bacterianas, que pueden provocar enfermedades más graves como la enfermedad periodontal.

Respiratorias:

Síntomas: Tos crónica que suena como un "ganso", dificultad para respirar, secreción nasal, fiebre.
Posible Causa: Los perros mayores pueden ser más susceptibles a infecciones y enfermedades respiratorias, como la bronquitis, colapso traqueal o neumonía, debido a la debilidad del sistema inmunológico.

De la Piel:

Síntomas: Picazón, enrojecimiento, llagas, pérdida de pelo.
Posibles Causas: Bacterias, hongos, y parásitos, y son más comunes en perros mayores debido a un sistema inmunológico comprometido o problemas subyacentes como alergias.

Oculares:

Síntomas: Secreción ocular, enrojecimiento, hinchazón, sensibilidad a la luz.
Causa: Infecciones como conjuntivitis, causadas por bacterias, virus o irritantes ambientales. Las cataratas también son comunes y pueden llevar a la ceguera si no se tratan. El glaucoma es una condición dolorosa que aumenta la presión en el ojo, también resultando en pérdida de visión.

Endocrinos:

Síntomas: Sed, apetito y micción frecuente, junto con pérdida de peso. Letargo, aumento de peso o caída del pelo.
Posibles Causas: Diabetes o Hipotiroidismo, respectivamente.

Cambios en el Comportamiento:

Desorientación y confusión: Pueden perderse en lugares familiares o no reconocer a personas conocidas.
Cambios en el ciclo de sueño: Es común que los perros ancianos duerman más durante el día y estén inquietos o activos durante la noche.
Ansiedad o miedo: Algunos perros pueden volverse más ansiosos o temerosos sin razón aparente.
Aislamiento: Pueden mostrar menos interés en la interacción social y preferir estar solos.

Cardiovasculares:

Síntomas: Tos, dificultad para respirar, y fatiga extrema.
Posibles Causas: Insuficiencia cardíaca, el corazón se debilita; o hipertensión, presión arterial alta.

Trastornos Neurológicos:

Síntomas: Convulsiones, temblores, pérdida de equilibrio o dificultad para caminar.
Posibles Causas: Problemas en el cerebro o sistema nervioso.

Digestivos:

Síntomas: Dificultad para defecar, heces con consistencia aguada o líquida, vómito, sangre en las heces.
Posibles Causas: Colitis, diarrea crónica, gastritis, úlceras, cáncer y falta de absorción de nutrientes.

Renales:

Síntomas: Pérdida de control de la vejiga (incontinencia), lo que puede resultar en accidentes dentro de la casa. Micción frecuente, aumento en la sed y pérdida de apetito.
Posible Causa: Enfermedad renal crónica.

Hepáticos:

Síntomas: Ictericia (coloración amarillenta de la piel y ojos), letargo, y pérdida de apetito.
Posible Causa: Insuficiencia hepática. El hígado puede deteriorarse con la edad, lo que lleva a una acumulación de toxinas en el cuerpo.

Cáncer:

Síntomas: Bultos, principalmente en axilas, cuello o panza, son duros y suelen aumentar de tamaño con el tiempo; verrugas que crecen inusualmente, pérdida de peso, sangrado inexplicable, o letargo.
Posible Causa: Los perros mayores son más susceptibles al cáncer. Puede afectar diferentes órganos y manifestarse de diversas formas. Es importante hacer una biopsia en caso de encontrar bultos.

Articulares y Óseos:

Síntomas: Dolor y dificultad para moverse, inflamación, rigidez, espalda arqueada, arrastre de las patas, temblores, cadera caída, particularidad en la manera de sentarse, lesiones o fracturas más frecuentes.
Posibles Causas: Displasia de cadera y codo, hernia discal, y condiciones genéticas que pueden empeorar con la edad.

Estos síntomas y enfermedades pueden afectar significativamente la calidad de vida de un perro anciano, por lo que es esencial mantener una vigilancia constante, no autodiagnosticarlo y consultar con un veterinario para un manejo adecuado.

La importancia de visitas frecuentes al veterinario

Lleva a tu peludito senior por lo menos 1 vez cada 3 meses con el médico veterinario, éstas son las razones:

Detección temprana de enfermedades: Las revisiones regulares permiten detectar estos problemas en sus primeras etapas, lo que aumenta las posibilidades de tratamiento eficaz y mejora la calidad de vida del perro.
Monitoreo de la condición física: Durante las visitas al veterinario, se evalúa el peso, la movilidad, articulaciones, la salud dental y otros aspectos físicos. Asegúrate que tu veterinario realice un examen físico para detectar bultos y tumores, dolor e irregularidades en su cuerpo.
Evaluación de los sentidos: Las revisiones regulares permiten detectar si tu perro está perdiendo el oído o la vista, y al hacerlo, puedes adaptar tu casa y sus espacios para su comodidad y facilitarle la vida.
Actualización de medicamentos y suplementos: El veterinario ajustará las dosis o recetará nuevos medicamentos que ayuden a manejar mejor cualquier problema de salud.
Monitoreo de cambios de comportamiento: El veterinario podrá identificar si tu mascota está sufriendo desorientación, ansiedad, cambios en el sueño, demencia, etc. Procura brindarle cada detalle de su rutina diaria y cualquier pequeño cambio en su comportamiento que hayas notado para identificar la causa y recibir recomendaciones para controlar estos síntomas.
Vacunas: Aunque los perros mayores no necesitan tantas vacunas como los cachorros, debes asegurarte que esté protegido contra enfermedades contagiosas y que apliques aquellas vacunas que se requieren año con año. Aquí tenemos una guía detallada de las vacunas con las que debe contar.

¿Cuándo es momento de decirle adiós a mi perro?

Sabemos que despedirnos de nuestro perro es una de las decisiones más difíciles y dolorosas, pero es algo que debe hacerse cuando nuestro querido peludito está experimentando dolor crónico, dificultad extrema para realizar sus necesidades como comer, dormir, moverse y hasta respirar, desinterés en las actividades que antes disfrutaba, o que los tratamientos médicos no estén siendo efectivos y sólo estén prolongando su sufrimiento.

El amor que sentimos por ellos es inmenso e inigualable, y eso conlleva la responsabilidad de saber dejar ir cuando tu peludito ya no está cómodo, feliz y estable. Consulta con tu veterinario para evaluar objetivamente la necesidad de realizar una eutanasia, y si es así, pídele que te recomiende el proceso más sencillo e indoloro para tu mascota. Apóyate de tus seres queridos e incluso ayuda psicológica si lo necesitas. No subestimes tu proceso de duelo ni el de tu familia.

Cada caso es único, pide varias opiniones profesionales si es posible, habla con tu familia y el círculo cercano de tu peludito, y recuerda que el bienestar de tu perrito está por encima de todo. Respeta la vida de tu mascota y siempre actúa para su bien.

Si necesitas ayuda o consejos, síguenos en redes sociales y escríbenos a hola@partnerinpaw.com

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